Monday, February 07, 2011

Hang on

Yo no sé si podría "sacrificar" o "poner a dormir" a mi mascota. No lo digo parada desde un rincón egoísta, lo digo porque me parece antinatural y porque yo no querría irme antes de tiempo. Mientras pudiera recibir una demostración de afecto y hubiera seres dispuestos a darla, creo que no querría irme.

Lo único que me molesta de la idea de irme a vivir afuera es que no te sirve Skype para interactuar con tu mascota, y no hay manera de explicarle lo que pasa.

3 comments:

Cachito said...

No pasa nada. Te llevás tu mascota con vos.
De mis años de éxitos ininterrumpidos en Barcelona me volví con una mascota. Sí, en el avión.
Ahora vive conmigo en Argentina y asquerosea a todos los aninales "no viajados" de mi barrio.

recomnj:
raramente encuentro conveniente omitir mascotas. No jodás.

Carolain said...

Qué gato groso, un gato snob snob, sobre el esnobismo natural del gato.

No me lo llevaría porque el bicho está contento acá en su casa de siempre, con gente todo el tiempo; si me lo llevo, lo saco de su casa y lo obligo a pasar 8 horas solo de lunes a viernes. Mala suerte.

Nini. said...

Como con los humanos, cuando el animal sufre mas de lo que disfruta, te aseguro por experiencia propia que podes "ponerlo a dormir"...

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