Wednesday, April 05, 2006

La disquería de mi barrio

Uno de los lugares grosos de la adolescencia que casi, casi me pierdo por completo.

Me gusta vivir en una ciudad grande, no lo puedo negar. Me gusta que haya 40 cines, recitales todas las noches, montones de esquinas para conocer, aunque no siempre las aproveche. Pero a veces resiento un poco ese no sé qué de la gran ciudad que te roba las pequeñas cosas. Estás siempre corriendo, siendo pragmático, ahorrando tiempo, aprovechando la oferta, queriendo llegar a casa, y hay tanto que se pasa de largo..

Una de las cosas que casi me perdí, como buena hija que soy de la era de los shoppings y las "cadenas de", fue la disquería de mi barrio. El barrio de Congreso o Montserrat, a escasas cuadras del edificio que le da su nombre no oficial, es un barrio medio de merde. Como me decía mi vieja hoy, no es el peor barrio de la capital, pero es medio como un Bronx; está muy lejos de ser un barrio bien o medianamente próspero. Por eso tuvimos en el área una sola disquería, y entre que la descubrí y cerró no pasó mucho tiempo.

Se llamaba La Paponia, nombre que siempre me pareció espectacularmente simpático, y estaba en un local de estilo antiguo, como casi todo en el barrio. Techo alto, molduras, y bateas con discos por todos lados. Bastante polvo, y se levantan apuestas sobre si la pintura de las paredes tenía más años que yo o apenas unos pocos menos. Con mis compañeras del secundario solíamos ir a ver discos (y alguna que otra vez, comprarlos) a Musimundo, el de Avenida de Mayo y Perú, que nos quedaba de camino al Burger King donde íbamos a almorzar (McDonalds quedaba más cerca pero nos trataban mal). Se nota que las grandes cadenas reinaban en nuestra vida cultural y alimenticia. Y me acuerdo, porque todo tuvo un clima especial, del día en que con mi mejor amiga de aquella época entramos a La Paponia a comprar discos de los Ramones y chusmear un poco. Me acuerdo de ver los discos de Dylan y pensar "Tengo que escuchar esto algún día", de mirar las paredes con posters y tapas de vinilos, y entusiasmarme porque no sabía quiénes eran los de Yes, pero algún día iba a tener tiempo y plata como para enterarme, y eso me iba a hacer feliz.

Juntamos los discos que queríamos, y nos paramos delante del mostrador para pagar. Estábamos revisando bolsillos de pantalones y mochilas, contando monedas a ver si nos podíamos llevar lo que habíamos elegido porque habíamos calculado mal, y cuando finalmente terminan las cuentas y ponemos los puños sosteniendo varios billetes chicos y monedas sobre el mostrador, el señor de la disquería nos pregunta si nos quedan monedas para el colectivo; que si no, no hay problema, descontamos los boletos de los discos. Sonreímos, le dimos las gracias y le dijimos que no hacía falta. Hablamos un rato de discos, de artistas y géneros. La diferencia entre el empleado de Musimundo que se quiere ir a la mierda porque probablemente lo tienen cagando, no le pagan bien y el uniforme de poliéster es incómodo, y el dueño de la disquería del barrio, al que le gusta ver a los pibes de 15, 16 años, rebosantes de entusiasmo y descubriendo cosas nuevas, yéndose a pata a casa con tal de poder llevarse un disco más.

Lamentablemente, así como video killed the radio star, la banda ancha y el mp3 mataron a la disquería de barrio [EDIT: también las cadenas de disquerías las aplastaron, como bien dice Maurus]. Es lógico: un CD virgen cuesta un mango, los discos se encarecieron horrores, y las disquerías chicas son los eslabones más débiles de la cadena. Por lo pronto, me quedan un par a unas 10 cuadras de casa, pero ya es otro barrio.. [y nunca tienen lo que busco]

Hace poco demolieron el local donde estaba la disquería. Compró el lote el colegio religioso que está en esa manzana, así que además de pena me da un poquito de bronca. Pero bueno, todo sigue su ciclo. Yo ahora tengo una "tarjeta de beneficios" de una cadena de disquerías que me cae un poco menos mal que el resto, mientras sueño con algún día encontrar una disquería como la Championship Vynil de High Fidelity. O que resucite la disqueria de mi barrio ^_^

5 comments:

Agustin.o said...

Que buena sensacion esa, no?! La de comprar un cd nuevo y q no podes esperar a llegar a tu casa y ponerlo hasta el hartazgo. La musica fue algo clave en mi adolescencia, aunq reconozco q en las disquerias de mi ex barrio "Almagro" y ni siquiera en Musimundo, tenian lo q buscaba y terminaba en Tower. Lo feliz q era con esa cadena! Cuantas "mensualidades" me habre gastado ahi..

Maurus said...

uuuuuuuuuuuu... tocaste un tema de aquellos!!!
Mirá... yo, como buen fanático de la musica, tenia mi set de disquerias... en las cuales no entraba ni musimundo, ni tower (aunque si compré cosas alli,obviamente)
La diferencia básica entre el Antigua vendedor de discos y los actuales en musimundo y tower, radicaba mas que nada en que... el SR.AntiguoVendedorDeDiscos casi siempre!!! AMABA LA MUSICA!!! y eso hacía que esos simpaticos, curiosos y vivos personajes, me cayeran extremadamente bien... y asi me hice amigo de unos cuantos...
Me conseguian cosas INCONSEGUIBLES... me avisaban de nuevas bandas y grupos... me recomendaban cosas y el 98% de las veces acertaban en sus recomendaciones!!!
Muchos de ellos tambien vendian libros... por lo que yo gastaba sueldos enteros alli (total vivia con mis viejos en esas épocas)... y me pasaba tardes enteras charlando, buscando, escuchando o leyendo...
Esos momentos, estan incrustados dentro mio para siempre... Cuando musimundo y tower desembarcaron en nuestro pais... uno a uno... se fueron cayendo... como asi cayeron muchos almacenes de barrio... carnicerias... verdulerias... etc... gracias a Jumbo, Carrefoury esos... Todo en nombre del progreso... En nombre del mas poderoso... Parece que imposible progresar sin pararse sobre cadaveres...
Parece que el progreso se basa en deshumanizar las cosas... y hacerlas masivas... y asi lentamente se va perdiendo una de las magias que nos hacen humanos... que es fraternizar mas allá de que necesitemos laburar y comerciar para vivir... (Ops... me fuí al recarajo filosófico)

Acotacion al margen: El comentario tuyo de la Tirada abajo de la dsqueria... me hizo acordar al toque a la hermosisima pelicula "Cinema Paradiso"!!! (que me hizo llorar como a un nene que le sacaron el chupetin!!!! mucho mas que E.T.)

RYC: Me encontó lo que escribiste en el mega comm

Maurus said...

loco!!! que mal que escribo!!! como le pifio a la vocales!!! cosa de locos che!!!

SEBASTIAN CADENABA said...

La disqueria sigue estando! Se mudo luego de estar donde vos decis a Talcahuano casi Corrientes, con otro nombre...pero el dueño es el mismo y sigue el mismo estilo

Carolain said...

Buena onda! Gracias por el dato.

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