Insomniac in BA

Robar elaborando sobre posts de otra gente es la especialidad de la casa. Enjoy.

Leyendo este post en un blog que acabo de encontrar, me vinieron un par de cosas a la mente..

No voy a discutir que la fidelidad por la fidelidad misma, como pauta cultural, es una gansada. En eso creo que el 95% de la gente con la cual me interesaría sostener una charla trascendente va a estar de acuerdo. Si bien tengo que admitir que los comportamientos socialmente correctos a veces me ofrecen la oportunidad de poner piloto automático cuando no quiero pensar, me parece una buena meta para mi vida y la de cualquiera el poder desaprender unas cuantas cosas para poder portarse cada vez más como a uno se le dé la gana (siempre respetando aquello de que los derechos de uno terminan donde empiezan los del prójimo).

Leyendo el post que linkeo me vino a la cabeza, como un comentario al margen, que la fidelidad se puede dar en la práctica como algo alejado del concepto restrictivo y más cercano al amor.

Hay motivos por los cuales yo no salgo de levante los sábados a la noche, no comparto mi amor con otra gente como lo hago con mi pareja, y si mañana me dieran ganas de arriesgar mi vida importunando balleneros japoneses en gomones de Greenpeace, probablemente no lo haría. Dejar en casa un novio adolorido, o con el corazón en la boca preguntándose si voy a volver, son ideas que no me terminan de convencer.. Uno puede amar muchas cosas y personas en la vida, pero puede haber una persona o una cosa que amemos tanto como para que un desaire a ellos sea un desaire a nosotros mismos, más allá de los deseos contradictorios que uno pueda tener. Nadie se sorprende al escuchar a un padre decir que ama tanto a sus hijos que daría la vida por ellos. Entonces tampoco debería ser muy sorprendente escucharlo decir que daría otras cosas (menos dramáticas) por ellos. No es renunciar a ser feliz, es encontrar otra manera de serlo. Y ambas me parecen geniales.

Viéndolas desde lejos, uno podría decir que no hay ninguna diferencia entre la madre que hace un alto en su carrera para criar a sus hijos porque no sería feliz alejándose de ellos, y la que deja su carrera para criar a sus hijos sólo porque así le enseñaron que tenía que ser. Pero vistas de cerca, una se somete a los mandatos sociales, mientras la otra ejerce su derecho a amar de la manera que mejor le salga.

Un tema para discutir sería qué hay detrás de los sentimientos de esas personas por las cuales decidimos aprender a ser felices de una manera distinta a la que hubiéramos eligido si no fuera por ellos. ¿Para qué trabajar más duro para ahorrar y llevar a los chicos de vacaciones? ¿Por qué no querés ver llorar a tu novia? Cuál es, también los chicos y la novia podrían ser menos egoístas, ¿no..?
...y qué sé yo. Hay amor. Si uno lo siente, se entrega, no se hace preguntas malintencionadas para engañarse a sí mismo. Y si no lo siente.. basta de farsa.

Hay gente que es feliz dedicándose a una labor. Hay gente que se casa y es feliz. También hay gente que cree que es feliz y después se divorcia o maldice sus años de trabajo, pero eso ya es otro asunto.. Si fuera fácil distinguir entre el deseo real y las boludeces que te meten en la cabeza, todos los psicólogos se morirían de hambre.